A medida que avanzan los meses, las tareas en la Dirección de Gestión Ambiental se ajustan continuamente según la planificación establecida y las necesidades emergentes. Con la llegada del invierno, las actividades de limpieza de cauces, rejillas y sifones se intensifican para asegurar que los canales puedan recoger la mayor cantidad de agua lluvia posible, minimizando así el riesgo de inundaciones que afecten a las viviendas de los vecinos.

Durante los meses previos al invierno, se llevó a cabo una exhaustiva limpieza de los cauces de los diferentes canales que atraviesan la ciudad. Ahora, con la proximidad de la temporada de riego, es crucial preparar estos canales para su función de llevar agua a los terrenos agrícolas.

Las cuadrillas del Departamento de Operaciones se han desplegado en sectores críticos de la ciudad, como Avenida Las Torres, Avenida La Compañía y el sector de Los Quilos con El Litoral, realizando tareas de limpieza para retirar el barro y el material acumulado debido al arrastre de las aguas. Estas labores se priorizan de acuerdo a las visitas técnicas realizadas constantemente.

La limpieza de cauces es una tarea continua en Rancagua, dada la necesidad de obras mayores de evacuación y circulación de aguas lluvia y de riego. Actualmente, los funcionarios y la maquinaria municipal están dedicados a asegurar que no haya desbordes cuando se abran las compuertas en las bocatomas del río Cachapoal durante la temporada de riego.

Esta iniciativa reafirma el compromiso de la Municipalidad de Rancagua con la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos, trabajando de manera proactiva para enfrentar las necesidades estacionales y garantizar un entorno seguro y eficiente para todos.